En mi colaboración anterior, aborde el tema de la visión de los criminales.
Lamentable es que no vean mas allá de su “profesión”, pero una vez detenidos (si es que no reciben una dosis de plomo antes) y llegan a las cárceles de nuestro país, esa vocación criminal será exacerbada. Y ahí es donde quiero detenerme para hacer unas reflexiones.
Esta clarísimo a la vista de toda la sociedad que el sistema penitenciario mexicano está podrido. Cuantos ejemplos y de qué tipo conocemos, donde autoridades penitenciarias están por completo coludidas con delincuentes que en teoría purgan condenas? Muchísimos ¡ y el día de ayer me sorprendí una vez más al enterarme que la mal llamada “Reyna del Pacífico” se sometió a una operación estética dentro de la cárcel ¡¡ Caray que nos falta por ver ¿?
Si confluyen en un penal todos los “grandes cerebros” del crimen, lógico es pensar que desde adentro –si se les permite- seguirán con sus actividades, eso es lo que saben hacer, son profesionales casi todos. Lo que crea un sentimiento de indignación es que las autoridades, lejos de intentar una rehabilitación de los detenidos, se contaminen, entren en su inercia delictiva y finalmente se vendan a los “encantos” que da la terrible complicidad de vigilado y vigilante.
En dicha dinámica, el estado, responsable del caminar de las cárceles ha venido jugando un papel siempre reactivo. Actúan cuando ya les dieron el palo y eso amigos lectores es una falta de responsabilidad inmensa y una exhibición de incompetencia en lugares donde deberían ser el ejemplo de control y orden. Si la autoridad no puede siquiera controlar las cárceles, donde se supone tiene todo el hándicap a favor. Cómo esperar mejores cosas de ellos en las calles. Triste mensaje envían...
Hay que recordar famosas fugas de reos, donde se han llegado a “escapar” hasta 141 reos al mismo tiempo (Nuevo Laredo, 17 de Diciembre 2010) y el dato de 350 reos fugados en todo el 2010, casi 1 diario ¡¡ Y qué decir de la fuga del Chapo hace ya 10años del penal de Puerta Grande …perdón Puente Grande, Jalisco.
Para cuántos millones de dólares le gusta que haya sido el “Ticket” de salida ¿? Hay quien dice que fueron más de 20. Y aquella jornada donde los propios custodios proporcionaron armas y patrullas en Coahuila a los reos para hacer ejecuciones. Hay tantos ejemplos, una barbaridad ¡
De considerar también es la sobrepoblación de los penales, donde hay datos de cárceles que tienen hasta un 300% arriba de lo que fueron construidas. Y que son centros de acopio de armas y drogas y, que mafias han creado “empresas” de distribución en inmobiliarias dentro de los penales donde venden espacios a quienes tienen dinero para pagarlos. Increíbles formas de lucrar, sólo posibles con la total complicidad de quienes los “vigilan”
En la actual guerra del gobierno contra la delincuencia, la cual se encuentra en una curva siempre ascendente y no se ve para cuando amengüe el temporal. Los gobiernos Federal y de los Estados no voltean a ver las cárceles mexicanas de manera seria, ignoran la infraestructura y el personal que en ellas labora y en esa suerte se han convertido en verdaderas oficinas y universidades del crimen.
Puede llegar un muchacho de 18 años con un delito menor allí y en unos meses saldrá con múltiples contactos y nuevas “técnicas” para seguir su carrera en las calles una vez que lo suelten, sale pues, con mejores herramientas para delinquir.
Urge, amigos lectores que el estado desarrolle una reforma penal integral. Con otra manera totalmente distinta de operar las cárceles. Esos son lugares de castigo y readaptación, claro dentro de los derechos fundamentales de todo ser humano, pero finalmente son lugares para pagar agravios, no para seguirlos cometiendo e incrementándolos contra de los que nos portamos bien y de paso los mantenemos con nuestros impuestos. Vaya ironía.
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